Los videojuegos son instrumentos muy poderosos, tal vez los más utilizados en las redes. Las investigaciones no han comprobado que exista una relación causal entre tener conductas violentas y usar los videojuegos. Llama la atención que en el discurso político se demonicen a éstos.
El maestro Centeno nos dice que no hay evidencia científica que demuestre que los juegos fomenten y sean la causa de la violencia social que hoy padecemos. Nos muestra estudios que afirman lo contrario. Los videojuegos, dice Jorge, promueven la memoria y fomentan el trabajo en equipo. Concluye que Jugar con contenidos violentos no te lleva a tener actitudes o comportamientos agresivos. Incluso hay investigadores que señalan que el aumento en la venta de videojuegos coincide con la disminución de la violencia real.
Lo que dicen los estudios es que el entorno familiar, la exposición a la violencia real, el abuso infantil, el bulling, las condiciones de pobreza y la falta de la figura paterna si son elementos para configurar un comportamiento violento. Otros estudios, afirman que el narcotráfico y sus narrativas son la causa real… crean un ambiente que normaliza la violencia. El uso moderado de los videojuegos es finalmente inocuo. Jugar a dar de balazos, sortear emboscadas con bombas o destruir submarinos o combatir enemigos no construye una personalidad violenta. Probablemente las normalice o las catalice. Es el entorno real y próximo el que configura un comportamiento violento.
Al maestro Centeno le preocupa el uso político que fetichiza los videojuegos… los políticos son irresponsables cuando llevan agua a su molino y crean un discurso prohibicionista que achaca a los videojuegos la violencia estructural, sistémica… y cuando, en realidad, es responsabilidad de los políticos acotarla, disminuirla y erradicarla… según Centeno los políticos de MORENA y de otros partidos dicen defender la “salud mental de los niños y jóvenes” exigiendo a los padres una mayor vigilancia de sus críos, evadiendo el problema estructural, sistémico…lo que se requiere es reconstruir la vida social desde una perspectiva humana y combatir frontalmente a los criminales.